“Lo único constante es el cambio”.
Heráclito de Éfeso
A lo largo de nuestra vida hemos sido testigos de los cambios que ocurren en el entorno, en las empresas, en los productos y en los hábitos de los consumidores. Algunos de estos cambios los hemos presenciado como mejoras incrementales, y en otros casos podemos ser testigos de innovaciones disruptivas, que vienen a cambiar el orden de las cosas.
Nos podemos remontar a la máquina de vapor (James Watt 1774), que fue sustituida por motores de combustión interna (Nikolaus Otto 1886) y cada uno de estos hechos marcó un hito en su tiempo; hoy en día tenemos más variedad: carros híbridos, eléctricos y nuevas alternativas como el motor de nitrógeno.
En la industria de los celulares pasó igual, Nokia y BlackBerry, dos empresas ícono de los inicios de la telefonía celular, dejaron su posición dominante, porque hubo empresas que leyeron mejor el mercado, las necesidades de los clientes y supieron ajustarse, evolucionar y generar valor de una mejor manera que sus rivales.
Otro ejemplo que se aceleró después de la Pandemia del Coronavirus (2020-2022), fue el aumento de las transacciones a través del comercio electrónico; lo que ha llevado a replantearse el negocio de los minoristas con tiendas de grandes superficies, para utilizar tiendas de un menor formato, e incluso se tienen ejemplos de algunas de estas empresas que han desaparecido como Best Buy, o han tenido que cerrar algunas tiendas como como Macy’s y Target, entre otras.
Hace unos años Google era el buscador de información por excelencia, les comento que hasta esto está cambiando en nuestros días; 40% de los miembros de la Generación Z no realizan búsquedas en Google y los hacen en TikTok e Instagram.
Estos son solo algunos ejemplos de lo que Adrian Slywotzky expone a través de su libro “How to think several moves ahead of the competition” (1996), llamado migración de valor. Lo que en el contexto empresarial se refiere al cambio en la forma en que se genera valor para el cliente a medida que evolucionan las necesidades y expectativas del mercado. En términos prácticos, significa que el valor se traslada de modelos de negocio obsoletos a nuevos diseños que satisfacen de una mejor manera las demandas cambiantes de los clientes.
https://www.entrepreneur.com/es/noticias/40-de-los-miembros-de-la-generacion-z-no-realizan/431376
Para sobrevivir en ambientes de hipercambio, es fundamental desarrollar algunas habilidades, que nos permitan evolucionar de una mejor manera, para aprovechar el nuevo contexto y no simplemente que nos aferremos al status quo. Estas habilidades permiten no solo enfrentar desafíos, sino también aprovechar las oportunidades que surgen en un entorno dinámico e incierto.
Dentro de estas habilidades, tenemos las siguientes:
Adaptabilidad: Capacidad para ajustar el comportamiento, las estrategias y los pensamientos a nuevas situaciones y circunstancias; sabiendo que el cambio es un elemento constante dentro de nuestro entorno.
Resiliencia: Capacidad para recuperarse rápidamente de las dificultades y mantener la calma ante el estrés, la incertidumbre y la presión.
Capacidad de aprendizaje: Disposición a adquirir nuevas habilidades y conocimientos, y a aprender de las experiencias, incluso de los errores; así como aprender a desaprender.
Comunicación efectiva: Capacidad para transmitir ideas, recibir información y establecer relaciones interpersonales de manera clara y constructiva.
Pensamiento crítico: Capacidad para analizar, evaluar y cuestionar la información, y para tomar decisiones informadas y resolver problemas de manera eficaz.
Proactividad: Anticiparse a los cambios, buscar soluciones innovadoras y no esperar a que las situaciones se resuelvan solas.
Inteligencia emocional: Manejar el estrés, mantener el enfoque y la calma en situaciones de incertidumbre, y de esta forma poder llegar a tomar mejores decisiones, y un trabajo en equipo con mayor armonía.
Digitalización: Dominar las herramientas y habilidades necesarias para navegar en el mundo digital y utilizar la tecnología de manera efectiva, encontrando áreas de oportunidad en este entorno de cambios.
Gestión de la incertidumbre: Afrontar la falta de claridad y turbulencia del entorno, para poder buscar soluciones, aprovechar las oportunidades y disminuir los riesgos. En contextos de alta incertidumbre lo más riesgoso es la parálisis, porque como no hay visibilidad en el futuro, nos obliga a detenernos y esto conlleva el hecho de dejar pasar oportunidad o no ver riesgos inminentes en el proceso, lo que llevaría a que los viéramos ya que pasaron las oportunidades y no las aprovechamos, o el riesgo ya se convirtió en realidad y el margen de maniobra ya es reducido.
Pensamiento Innovador: El hecho de encontrar nuevas formas de hacer las cosas, poder generar propuestas alternativas para dar solución a retos que no nos había tocado vivir, y nuestra capacidad para dar soluciones creativas y diferentes a lo existente.
Estas habilidades generan sinergia cuando más las necesitamos, y como ejemplo tomaremos lo vivido durante la Pandemia del Coronavirus (2020-2022) en donde se puso a prueba la capacidad de la humanidad para enfrentar retos que solo habíamos visto en las películas de ciencia ficción, en un ambiente de total incertidumbre. Dentro de los cambios que vimos fue el poder utilizar el procedimiento para las vacunas de ARNm o Vacunas de RNA mensajero, que, si bien se había desarrollado desde hace décadas, no se había hecho masiva su aplicación y esto a su vez fue reconocido con El Premio Nobel de Medicina 2023 para Katalin Karikó y Drew Weissman. También el término de planeación dinámica fue utilizado, como una posibilidad de ir dando pasos y avances “hasta donde se alcanzaba a ver”, después se volvían a reunir para tomar decisiones y así poder dar los siguientes pasos; estos son un par de ejemplos de acciones que se tomaron durante una etapa de crisis, incertidumbre que afectó al mundo entero.
Como podemos ver estas habilidades se pueden adecuar a una persona, a una empresa, a un país; lo importante es ser conscientes del grado de avance en cada una de ellas y desarrollarlas constantemente para estar preparados en todo momento, porque como ya lo dijo Heráclito de Éfeso… “Lo único constante es el cambio”.
Si tú también reconoces que el cambio es inevitable y que el futuro pertenece a quienes desarrollan habilidades clave para adaptarse, innovar y liderar en entornos inciertos, este es el momento de dar un paso adelante. La Inteligencia Artificial ya no es una tecnología del mañana, es una herramienta del presente que transforma industrias, empresas y profesiones. ¿Estás listo para ser parte de este cambio? Inscríbete para recibir más información sobre nuestra Certificación en Inteligencia Artificial y comienza a prepararte hoy para el mundo que viene. bit.ly/cursosinnov