Cuando hablamos de mentalidad ganadora, es fácil que lo primero que nos imaginemos sea una persona individualista cuya principal meta es ser más competitiva que el resto. Sin embargo, también podemos entender este concepto de una manera que no tenga que ver con la avaricia: ser ganador puede significar, simplemente, no renunciar a conseguir aquellas metas personales que, si se apuesta por el esfuerzo, pueden llegar a alcanzarse.
Dicho de otro modo, tener una mentalidad ganadora implica no dejarse seducir por las múltiples excusas que muchas veces nos ponemos a nosotros mismos para no salir de nuestra zona de confort.
En este artículo te mostraré cinco componentes básicos para desarrollar una mentalidad ganadora.
Componente #1: Autoproyección
Se refiere a tener claro no solamente qué quiero lograr en la vida, sino cómo va a ser ese resultado, cómo va a ser el camino para lograrlo y lo que conlleva su proceso.
Componente #2: Localizando objetivos
Así como debo tener claro el camino que voy a recorrer, también debo saber exactamente el destino al que quiero llegar. Qué tipo de actividades deben realizarse, qué tipo de persona debo ser para llegar a mi meta final.
Componente #3: Detectando las excusas
Examinar los propios pensamientos y aprender a localizar las excusas que nos mantienen estancados. Es conveniente hacer esto sin pretender ser muy indulgentes con nosotros mismos y, si tenemos dudas, siempre podemos pedir la opinión de personas de confianza para abrir el panorama.
Componente #4: Siempre positivo
Analiza, observa y agradece lo aprendido de cada dificultad; todo es parte de un orden para tu desarrollo personal y profesional.
Componente #5: Salir de tu zona de confort
Este es el paso más difícil, ya que implica exponernos a situaciones algo estresantes pero que nos acercan más a nuestras metas. Para ello es bueno encontrar estrategias y disciplinas para impulsarnos a seguir una secuencia de acciones muy claras y específicas; de este modo no podremos justificarnos con excusas convenientes, porque las pautas de lo que debemos hacer son tan claras que no queda lugar a dudas de si las hemos realizado o no.
Además de identificar y aprovechar oportunidades, es necesario tener una mentalidad ganadora que te permita siempre estar preparado para el éxito, superar esos obstáculos que a veces son tan difíciles y sencillamente persistir hasta lograr tus metas.